Mi cuerpo es mío

A Alme no le gusta darle besos a aquellas personas que siente que No conoce bien. Todas las personas cercanas ya lo saben y solo unos pocos aún no lo entienden.
Debo confesar que muchas veces me he sentido avergonzada  Pensando en lo incómoda que se sentiría la persona a quien Alme no quería saludar.
Desde muy pequeña habían personas específicas a las que ni siquiera se les quería acercar. Ella lloraba tan solo mirándolas. 
Alguna vez alguien en la familia me aconsejó llevarla donde un psicólogo para que le quite la timidez. Mi cara fue una: WTF! 😒 por supuesto esa persona aún no era papá ni mamá. Posiblemente si lo hubiera sido su percepción de las cosas habría sido distinta. Aunque creo que para entender a un niño no es necesario ser padre o madre.
Pensé que eso no tenía que ver con ser tímida, su tema era otra cosa. 
En algún momento cuando era muy pequeña le expliqué que si no quería dar beso, era su decisión y que nadie debía obligarle. Pero habían personas cercanas que incluso reaccionaban diciendo cosas como “no importa porque cuando nazca tu hermanito el Me los dará” o ponían cara de resentimiento. 
En su primer día de clases en el Colegio mientras todos los niños le daban besos a la
Mujer desconocida que los recibía en la puerta, Alme se los Negaba. Le dije que a ella no le gustaba dar besos y alguien por ahí comentó que posiblemente sea por un tema sensorial.
Abrí mi mente y pensé que podría ser eso y en cualquier momento la tutora del colegio me recomendaría una terapia. Así me la Pasé todo el Primer año. Pero las terapias nunca llegaron porque ella simplemente no  las necesitaba.
Hoy la situación cambió notablemente. Y aunque no le gusta darle besos a personas desconocidas, sabe que saludar es un tema de amabilidad y cortesía con las personas.
Ella sabe que nadie la puede obligar a nada. Que su cuerpo, su cara, su pelo,todo su ser es suyo. Y no debe hacer nada que la haga incomodar; Ni siquiera el darle Un beso a alguien por más comentarios y presión que le pongan.

He visto en repetidas ocasiones madres insistiéndoles a sus hijos para que saluden con beso cuando los niños no lo quieren hacer.  Recordemos que Saludamos así por costumbre y cultura local.  Insistiendo en los besos,  estamos haciendo que nuestros pequeños se sientan incómodos, forzándolos a hacer algo que no quieren hacer. Creciendo con la idea que deben satisfacer a los demás por obligación y creerán que es lo correcto.

Yo intenté relajarme con el Tema y lo logré. La entendí. Acepto cuando mi hija no quiere dar beso pero le enseño que saludar es un gesto de educación.

Recuerda una cosa muy sencilla: El cuerpo de tu hijo es suyo. Enséñale que los demás deben respetarlo y que no, es No.

#eltoquedezazá

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